Rutina
Después de un largo paréntesis
vuelvo a la carga con más fuerza y ganas. Y es que nunca viene mal hacer un parón
para reflexionar que es lo que quieres hacer en la vida. Apuesto a que muchos
de vosotros a menudo os imagináis haciendo cosas que os gustaría realizar, el
problema es que nunca encontráis el momento o ponéis miles de excusas.
Se de primera mano lo costoso que
es querer llevar a cabo mis ideas, a veces quiero hacer tantas cosas que acabo
sin hacer nada y con un montón de frustración. Soy de darle muchos vueltas y
soñar con las actividades que creo que me llenarían. Pero son tantas que no
puedo abarcarlas todas. Es imposible porque no me daría tiempo.
Un ejemplo muy típico de esto es
cuando comienzas un libro y al poco tiempo empiezas otro, te hubiera gustado
terminar el primero, pero sigues con un tercero y al final tienes 6 libros
empezados que no has acabado. Si no atender a lo que decía mi abuela: el que
mucho abarca poco aprieta. Es decir si haces muchas cosas es muy probable que
salgan mal ya que no estas prestando la atención que merece cada una de las
actividades.
Yo me he creado una lista con
todas las cosas que me gustaría hacer. He tenido que elegir una de ellas y
convertirla en rutina. Las cosas se hacen de una en una. Hay que elegir la más
importante y empezar. El criterio lo pones tú. Tu sabes que es lo más
importante, aquello que tienes que empezar si o sí. No hace falta que sea 1 de
enero para empezar con nuevos propósitos. Se puede empezar ya. No lo alargues más.
Razones por las que empezar las
cosas que quieres hacer
-te vas a sentir bien contigo
mismo
-vas hacer algo productivo y
beneficioso para ti (dando por supuesto que las cosas que quieres hacer son
cosas que te aporten algo bueno)
-Tu mente va a crear nuevas
conexiones al darle algo nuevo que hacer
-Vas a estar activo
…
“Lo que importa es lo que hagamos
no lo que hicimos”
-Kase.o-
No vale la pena lamentarse por el
tiempo perdido en el pasado, ya que no se puede modificar. Lo que si podemos
hacer es trabajar en nuestro presente para vislumbrar un mejor futuro. Hay que
ser consecuente con nuestros actos. Muchos de vosotros pasareis de largo
leyendo este post, pero seguro que a alguien habré tocado la fibra sensible,
alguien que lleva algún tiempo queriendo empezar algo y todavía no se ha
decidido. Si lograra motivar a esa persona yo ya me daría por satisfecho.
La mejor forma de empezar es
empezar de cero.
-Anónimo-
2 ejercicios para empezar y no
recaer en la dejadez
Hacerse un horario (nivel 1,
principiante)
El ejercicio es bien sencillo,
primero tienes que poner en claro que es lo que te gustaría hacer, poner en una
lista todas las cosas, a partir de ahí tienes que priorizar.
Elije la que consideres más
importante y comienza con ella.
Crea un horario añadiendo la hora
en la que tienes previsto realizar esa actividad, puedes ser felxible, pero no
dejes de hacer la actividad (tú decides que es más importante en tu vida).
La dos huchas (nivel avanzado)
Si quieres asegurarte que vas a
cumplir con la tarea propuesta, este es el ejercicio adecuado.
Compra dos huchas y cada vez que
hagas la tarea mete el dinero que te has propuesto ahorrar antes de empezar el
ejercicio (por ejemplo, 1€ o 50 cent) si no cumples la tarea y no la has hecho más
tarde, tienes que coger el doble de dinero y meterlo en la otra hucha (por
ejemplo si te habías propuesto 1 € y no has hecho la tarea te toca poner 2 € en
la otra hucha). A final de mes el dinero que has metido en la primera hucha
será tu recompensa, gástalo en ti, en lo que más te apetezca. Pero el dinero de
la segunda hucha tendrás que dárselo al primer mendigo que encuentres por la
calle.
Este ejercicio es para gente
valiente que quiera arriesgar y apostar por que hará las tareas. Es trabajo de
cada uno ser honrado y hacerlo bien ya que nadie va a controlar si has llevado
a cabo o no.
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